Sūtra II. A través de las técnicas de yoga se consigue el cese de las fluctuaciones de la mente
Pāda I. Sūtra II: Yoga cittá-vrtti- nirodha
Yoga: conjunto de técnicas psicofísicas
Cittá: conciencia, mente o sustancia mental, conjunto de acciones mentales.
Vrtti: proceso, función o modificación mental y emocional, fluctuaciones mentales y emocionales.
Nirodha: suprimir, cese, detener, cancelar
“A través de las técnicas de yoga se consigue el cese de las fluctuaciones de la mente”.
El yoga es un conjunto de técnicas psicofísicas cuya función está encaminada a la progresiva evolución del ser humano como individuo, integrando como un todo las distintas partes que forman la persona (cuerpo, mente, espíritu), consiguiendo unificar las vibraciones del cuerpo con las de la mente y el espíritu, se llega a un estado en el que el practicante descubre la unión del ser individual con la totalidad del universo o como el yoga lo llama “el absoluto”, es el estado de conciencia final conocido en el yoga como Samādhi. Pero antes hay un largo camino.
Una mente indisciplinada es inestable, puede estar confusa y distraída. Este estado mental se considera “tamas” que se traduce como impuro, es el estado mental natural en la mayoría de las personas. Con la aplicación del yoga se consigue que la mente sea más calmada, el yoga trabaja con una mente concentrada en un punto, y controlada. Estado mental que se considera “rajas” que se traduce por inercia, ya que la mente tiende a seguir sus pautas anteriores y hace falta la voluntad y la intención para alterar su inercia. Por último el aspecto puro de la mente se considera “sattva” y se traduce por pureza, es el estado mental que en el yoga se considera el natural del ser, y que por la falta de conocimiento (o exceso de conocimiento del día a día) perdemos desde la más tierna infancia (se supone que nacemos en ese estado mental), el yoga proporciona lo necesario para recuperarlo.
El objetivo es la eliminación completa (purificar la mente) de todas las falsas identificaciones y procesos mentales del subconsciente y aquietar el flujo de los pensamientos mediante las técnicas del yoga, para liberarse de los condicionamientos mentales, provocados por esas falsas identificaciones, (que abarcan a todos los condicionamientos físicos, emocionales, mentales, sociales, familiares, etc.).
Nos identificarnos con nuestros pensamientos, emociones, sensaciones es decir, nos identificamos con el ego. Las emociones, sensaciones y pensamientos son experimentados tan dentro de uno mismo que se llega a creer que eso es todo lo que hay, que somos lo que sentimos, lo que pensamos, pero detrás del ego, (que es quien cree ser todo lo que hay), está el observador, que observa a través de la conciencia interna. Al que descubrimos al aquietar la mente, al conseguir el estado meditativo (ausencia de discurso u movimiento mental ordinario y de expansión mental o trascendencia).
Ser consciente de sensaciones, emociones, pensamientos… no es lo mismo que identificarse con ellos. La identificación equivale a creer o sentir únicamente que… “yo soy lo que pienso, lo que siento, lo que vivo” y por tanto el pensamiento, las sensaciones, más las experiencias con sus consecuencias, y yo, somos uno o lo mismo, mientras que ser “consciente del pensamiento, las sensaciones y las experiencias con sus consecuencias” implica separarse y desapegarse de todo ello, poniendo distancia se distingue entre “el ser o el observador” el que observa el pensamiento, y el pensamiento en sí. “observador y lo observado” no son lo mismo.
Al cambiar esta conciencia o perspectiva, se hace consciente en el momento en que leemos o verbalizamos por ejemplo… “no soy la emoción que estoy sintiendo”, lo obvio se manifiesta, pero antes de ello a un nivel inconsciente, la emoción nos inunda y aunque no se verbalice “soy la emoción” la identificación se vivencia, en el momento de cambiar la expresión por “tengo una emoción que estoy sintiendo”, la identificación de “soy”, se transforma en “tengo”, cambiando un realidad por otra que amplía la perspectiva a algo que sucede. Es una interpretación.
El yoga enseña a observar, a diferenciar lo observado del observador, y es el primer paso para desapegarse de emociones, sensaciones… para desapegarse de la identidad (el ego).
En los textos hacen referencia a lo observado como el objeto, así un pensamiento, es el objeto observado, o una sensación, también es el objeto, al igual que un jarrón en una mesa que también es el objeto si es observado.
El proceso mental según el yoga: (es una forma de intentar comprender el funcionamiento de la mente).
1. La observación del objeto:
La información llega a través de los sentidos al cerebro, el objeto puede ser un sonido, un olor, una sensación al tacto, un sabor, algo que vemos, o un conjunto de todo eso, puede ser externo a uno mismo o parte de uno mismo, el objeto puede ser una emoción, un pensamiento… cualquier cosa de la que se pueda ser consciente, más incluso, un concepto concreto o abstracto, algo que sobre pase los límites de la mente como el concepto de Dios.
Una vez en el cerebro es “mánas” quien se activa, mánas es la parte de la mente que se dedica a pensar y dudar, (las funciones discursivas).
2. Buscar una conclusión acertada:
Se necesita al intelecto (buddhi), es el que realiza un análisis exhaustivo y para llegar a una correcta conclusión final, necesita comparar con lo ya conocido y experimentado, debe recurrir al subconsciente (Cittá).
3. Comparando:
Las experiencias pasadas son la referencia para las presentes, buddhi, el intelecto llega a la conclusión: conocido (yo sé), no conocido (yo no sé) la identificación (ego) con el objeto se ha producido.
A través de las técnicas del yoga se puede comprender como funciona la mente, el proceso pasa de una mente dispersa y voluble que se estabiliza progresivamente al concentrarse en un punto cada vez más sutil y espiritual, concentrada y calmada llega a la plenitud del silencio, un completo descanso interno y entonces descubres tu verdadera esencia.
Pero el camino no es fácil, todo lo contrario está lleno de obstáculos, el yogui debe superarlos para alcanzar la luz del conocimiento pleno de la conciencia absoluta.